APUC Gerardo Vasquez

Estado de las Discusiones de la IICCU al 4-8. 

Liderazgo Gremial en un Escenario Explosivo.

Las discusiones de la IICCU a la fecha 4 de agosto, muestran un comportamiento lento, si tomamos en cuenta que del total de 137 cláusulas de la convención, estas las económicas, que corresponden a un número aproximado de 42, son las de mayor repercusión por tener impacto económico, en consecuencia, en las 3 últimas semanas desde el 14 de julio hasta la fecha de hoy, donde se retoman las discusiones, se aprobaron, para el 14 de julio las cláusulas 112 sobre prestaciones sociales, en las que se declara que las Instituciones Universitarias continuaran pagando este concepto tal y como lo tienen estipulado en las actas convenios de cada universidad. De la misma forma, se aprueba la cláusula 113 sobre el pago de los intereses sobre PS,  Fideicomiso, y pago del 8.5% de intereses, como en la actualidad. FAPUV solicitó llevar el porcentaje al 17% y fue rechazado. El 15 de Julio se aprueba la cláusula 82 sobre las condiciones para la Jubilación, manteniéndose como estipula cada universidad en sus actas convenios, no sin antes superar una fuerte presión de OPSU por modificar el sistema jubilatorio de las Universidades. Para la semana del 22 de Julio se aprueban la cláusula 57 que trata el seguro de vida y accidentes personales para el personal fijo, contratados, jubilados y pensionados, por un monto para el seguro de vida de 150 mil para el 2015 y 200 mil para el 2016 y de accidentes personales de 200 mil para el 2015 y 250 mil para el 2016. La cláusula 58, que trata de los servicios funerarios, establece que el MPPEUCT garantizará el servicio a personal fijo, contratados, jubilados y pensionados en cuanto a traslado del difunto, trámites, arreglo, parcela o cremación, servicios, cafetería, carroza, avisos de prensa. En aquellas instituciones que garantizan el servicio se revisará para aplicar la más favorable. Para el 23 de Julio se aprueba la cláusula 56 de HCM, queda dividida en HC por un monto de 120 mil para el 2015 y 200 mil para el 2016. Se dispone una cobertura para M de 100 mil para el 2015 y 150 mil para el 2016. En este particular se mantuvo el criterio de FAPUV de diferenciar este monto de lo estipulado como 1.5% de la nómina total del personal para previsión social y del 1% para contingencia, que se mantiene igual y que se pretendía sustituir como aporte a los IPP y IPS y servicios auto administrados de salud de las Universidades, motivo fundamental por el que fue diferida la cláusula en varias oportunidades. También se aprobó un Fondo para Enfermedades Catastróficas por 50 millones que podrá ser repuesto por una sola vez. Si se requiere reponerlo por una segunda vez, se hará mediante una comisión conformada por los gremios y el Ministerio como sistema integrado. Completa esta parte, conjuntamente  la ya aprobada la cláusula 59, para la realización de los exámenes periódicos a los trabajadores. Para la semana del 28, 29 y 30 se aprueban las cláusulas 60 de ayudas especiales para tratamientos correctivos que incluye botas ortopédicas y similares hasta por 12 mil bolívares, lentes correctivos por 13 mil para el 2015 y 15 mil para el 2016 con cargo al límite por patologías oftalmológicas del HCM, camas clínicas, sillas de ruedas y otras ayudas técnicas para la movilidad que en aquellas universidades que disfruten de estos beneficios se mantendrán. La cláusula 61 incluye el pago o reembolso del 100% de las medicinas para los trabajadores y su grupo familiar y un monto de hasta 20 mil por evento o patologías en gastos por el concepto de medicina . La cláusula 66 dispone que el MPPEUCT garantiza a través de las instituciones universitarias los aportes a los IPP, IPS, auto administrado o fondo mutual, para continuar prestando los servicios médicos, odontológicos y contingencias médicas para los trabajadores. 

Con estos resultados a la fecha en que se reinician las discusiones, hoy miércoles 5 de agosto, están en cola la cláusula 55 del bono doctoral que ha sido diferida por la pretensión del gobierno de no darle carácter salarial , el bono vacacional, recreacional, bono de alimentación, y de salud, antes de llegar a la mas neurálgica y  crucial de las cláusulas como lo es la Nro 83 relativa a la escala de salario y el aumento salarial. En FAPUV y el resto de las Asociaciones, así como el comando Nacional Intergremial Federativo, incluyendo a todos los trabajadores, - con la excepción de la FTUV -, se espera y se tiene como punto de honor, la reconstrucción de la escala partiendo de 2 salarios mínimos para el cargo de menor rango, a partir del cual se reconstruye la interescala con un diferencial del 7% y en el caso de los docentes de 18% para TC y 20% para DE, sin solapamiento de cargos y movible, de modo tal, que cuando ocurra un aumento del salario mínimo, ya esta escala se mueve automáticamente, Luego de alli, se aplicará el % de aumento, con lo cual se repondría la primera condición para la recuperación y dignidad de las remuneraciones del sector peor pagado del país y del mundo, injustificable, una fea llaga dolorosa, para un Gobierno de justicia social.

Es por este ritmo y panorama de discusiones, donde los anuncios del Ciudadano Ministro Fernández, de asegurar que se firmaría la IICCU en la primera semana de agosto, no parece posible, salvo un milagro. Pero adicionalmente, está la situación que enfrentan los gremios por una gigantesca presión de los trabajadores agobiados por la situación económica calamitosa, ya en camino hacia estados de explosividad social a consecuencia de la escasez, desabastecimiento, hiperinflación francamente insoportable. Los trabajadores recibimos un bono vacacional insignificante, que ya se ha gastado en pagar deudas acumuladas. Es decir, hoy, los trabajadores universitarios están como si no han cobrado y esperan, y esperan un aumento sustancial cónsono con la propuesta entregada en 15 de abril y suscrita por todos los gremios y sindicatos del sector universitario.  Aunado a este hecho, el convencimiento silente, de que en realidad el gobierno no tiene una propuesta salarial digna para el sector universitario y por ende la discusión tomara un camino conflictivo impredecible. Los escenarios son 2: Un primer escenario nos muestra la posibilidad de que se presente una propuesta insuficiente a las expectativas de recuperación de las remuneraciones para el sector universitario de los trabajadores y que se produzca en las próximas semanas. Las Universidades en vacaciones, realizando cursos de verano, con su capacidad de movilización en un 30%, aun y cuando se declara que hay un estado de alerta, de Asambleas permanentes, de directivas en trabajo continuado, denuncia y vigilancia en las discusiones, la verdad es que su capacidad de reacción  y de impacto está, además, reducida, entre otras cosas por la actividad gubernamental en la OLP, los operativos para neutralizar los brotes de saqueos y de explosividad social que van a continuar a juzgar por los hechos de Bolívar, y otros estados, entre los cuales el día de ayer en Carabobo la GNB y la PNB evitaron un fuerte intento de saqueo en Macro Valencia. Adicionalmente, la campaña propagandística sobre el problema limítrofe con el Esequibo, las in-habilitaciones a dirigentes opositores y las luchas por posicionamiento ante las lecciones parlamentarias, conlleva, a diferir una respuesta contundente de rechazo a una propuesta salarial indigna del gobierno, para el retorno en el mes de Septiembre. Este es el 2do escenario. Septiembre nos recibe con un panorama de oferta salarial fraudulenta en la aspiración de recuperación dignificante del salario. Este aspecto toma relevancia por el concepto propio de Dignidad, por medio de la cual, es cuestión vital que los trabajadores muestren una postura firme ante el desconocimiento de lo que es merecer un sueldo que dignifique la condición humana. Esto quiere decir el acceso a los bienes sin lo cual, vivir ya no tendría sentido a partir del trabajo y la misión que cumple un Universitario para con el desarrollo de su país y la formación de los profesionales y que hoy, están reservados a una élite de la sociedad, corrupta, autoritaria, militarista y de un enorme atraso ideológico político y económico. En este segundo escenario, luego del receso vacacional y con un estado de rechazo e indignación, el gobierno puede presentarse con un pago retroactivo de aumento de Enero y Septiembre, y con el pago inmediato de la nueva nómina, que sería un ambiente de seguro debilitamiento de la movilización y protesta universitaria, sin que desmerezca la fuerza en la que pueden reaccionar los trabajadores con sus organizaciones. Si se presenta un panorama de conflicto y desacuerdo, el gobierno podrá argumentar el arbitraje como medio de diferir un conflicto en puertas inevitable, trasladándolo, incluso,  para el mes de diciembre, en el que gracias al llamado a las elecciones parlamentarias, según el estado de conflictividad, pudiera ser intervenido. Consecuencia: una enorme decepción que puede pesar en el resultado electoral a la AN. Otro aspecto de este escenario, es que las universidades se mantengan cerradas a partir de septiembre lo que facilita el cuadro intervencionista del gobierno nacional, aunque el panorama puede permitir la recuperación del estado anímico del votante en las parlamentarias para acudir a votar en masa.

El deterioro social creciente en el que los últimos datos de la encuestadora oficialista Interlaces, reconoce el escandaloso indicador del 25 % para la expectativa de consumo (esperanza de adquirir bienes y servicios) de la población de Venezuela sobre un indice de 0 a 200, en el que por encima de 100 es positivo el indice y por debajo de 100 es negativo, habla por si solo, de la tragedia nacional.  A pesar de los anuncios de Maduro de firmar la IICCU y de la aparente buena voluntad del Ministro Fernández y de su Vice-Ministro Jheyson Guzmán, la verdad es que en este 2015 no se ha presupuestado recursos para la discusión de tan importante instrumento laboral para el sector universitario. La verdad es que el gobierno no tiene una propuesta decente que ofrecer a los universitarios. La verdad es que se prepara irresponsablemente por el gobierno nacional, un estado conflictivo para incidir en la lucha por el poder en Diciembre y que el gobierno pretende jugárselas todas, sin embargo, de la peor manera.

En el fondo, la situación que no está dicha y aún mas preocupante, es que con la aprobación del aumento salarial que acuerde el gobierno, vendrá la lucha para que se haga efectiva, para que nos paguen la diferencia retroactiva desde enero. Ese, es otro escenario. Las elecciones parlamentarias de diciembre siguen siendo el punto diferenciador en la historia de la Venezuela de progreso o de destrucción nacional. Pero lo es también, la unidad de todos los Venezolanos, sobre todo de su dirigencia sindical y gremial, empresarial y política.

En definitiva de las actuales discusiones tenemos como aspectos reales:

1. Las aspectos favorables a los derechos hoy, son consecuencia de procesos de negociación realizadas en momentos de mejores condiciones para el diálogo y reconocimiento a la dignidad laboral de los universitarios donde se destacan las actas convenios y las Normas de Homologación que aun se sostienen.
2. El Gobierno Nacional mantiene una política de ataque a la intangibilidad de los derechos consagrados en las luchas gremiales y sindicales de los universitarios.
3. El Gobierno Nacional no tiene una política salarial para el sector universitario acorde a los estipulado en el artículo 104 de la CRBV ni tiene en el corto plazo, una previsión presupuestaria determinada para cubrir los costos de la IICCU.
4. Se hace necesario profundizar la lucha intergremial e intersectorial que incorpore a estudiantes y autoridades a la lucha por la dignidad de los universitarios.
5. El Gobierno Nacional y un conjunto complejo de actores preparados por este, ha emprendido una acción de división interna y fraccionalismo electoral e ideológico, con miras a debilitar los esfuerzos de la unidad intergremial e intersectorial, único medio para la lucha efectiva, en este nuevo acontecer reivindicativo de los universitarios y lo hace estimulando la conflictividad interna, creando acciones de conflicto bajo el argumento de falta de contundencia en las acciones de reclamo, y ataque contra los mismos actores para así favorecerse de las contradicciones.